domingo, 8 de diciembre de 2013

¿El weón parejito?

Soy weón. Síp, definitivamente muy weón. Soy weón, por ejemplo, porque cuando voy de peatón intento siempre cruzar en las esquinas o en los pasos de cebra y en verde. Soy weón porque no le compro a los "vendedores" callejeros esos que evidentemente son amigos de lo ajeno y sus productos aún están con los códigos de barra o alarmas de la tienda a la que le tocó le hagan su "retiro". Soy más weón todavía porque no uso Windows pirata, ni ando buscando antenas satelitales "movidas" para usar decodificadores de TV por cable pirateados. Soy weón cuando espero colectivo y me quedo en la parada y no me adelanto píllamente al que estaba antes que mí, para hacer parar unos metros antes al colectivero (que recuerdo una vez le dije a una tipa: Oye! respetemos el turno, que yo estaba aquí hace 10 minutos antes que tú y la muy fresca me respondió: "que poco caballero!!!" Cáacheeeen!!!)…, o en mi época de estudiante a principio de los 90 cuando me paraba en una asamblea frente a 200 almas y les decía -con argumentos- mis puntos que tenía en desacuerdo y claro…, recibía silbatinas y pifias para llevar a casa jejejeje,  o cuando me he metido en una pelea callejera cuando tres tipos le pegaban a uno solo y terminamos 2 contra tres y después al que le estaban pegando fue a sacar a los otros tres a la capacha!, o cuando hace un tiempo atrás recién aparecida la Camila Vallejos y dijo que jamás votaría o apoyaría a la Michelle jajaja yo dije: aquí está escupiendo para el cielo y alguno me dijo que ella, la Cami, era diferente, que no era como los políticos antiguos esos que dejaron la cagá en el país y que por eso había que creerle; en fin… motivos que me declaran weón hay muchos más todavía… (seguro más de alguien podría agregar también más de alguno)

Me detengo por un momento aquí y hago la siguiente reflexión: una cosa es identificarse o sentirse weón y otra muy distinta es que te digan en tu cara y con una sonrisa de oreja a oreja que eres muy re-weón!. ¿No es verdad? Eso como que… hum… me provoca un poquitín de desánimo :/

Y aquí estoy, una vez más, sintiéndome weón. En qué ámbito?, en el contexto de la elección presidencial. Yap, ya se que muchos dirán… buuu: política nooo, ya shiaooo. Pero ojo, sólo por unos momentos, activen su parte analítica del cerebro y sin prejuicios y observen los siguiente vídeos. Del bando que sean, respiren profundo y mírenlos completos. A los vídeos quítenle un porcentaje de veracidad, o condimentos más bien, por lo polarizado que pudo estar los que le hicieron la edición. Quitando todo eso, aun queda suficiente sustancia como para forma opinión.

Los vídeos, a los que me refiero, los dejo al final de este post.

Si poh!, una vez más siendo weón!, porque están diciendo que sólo hay dos opciones para elegir al próximo presidente y yo sostengo que debe haber una tercera opción. Claro, no la hay. De ahí entonces que mi opción no es otra que IR a votar NULO.

Muchos tienen miedo que salga de nuevo la derecha, por eso dicen: "mejor es votar por la Michelle". Otros dicen: nooo "la nueva pillería nooo" hay que votar Evelyn.

Increíblemente estamos en el mismo juego de siempre. 

Somos corderos, a los que hacen de cuando en cuando jugar, para que creamos que tenemos el control y creamos que somos nosotros los que decidimos los destinos de este país. Son los dos poderes de siempre, los que están rotando el poder (ufff he descubierto el agua tibia!!!!). Tampoco es que quiera que una Roxana Miranda tome el poder (sin menospreciar, pero vamos!, mantengamos las proporciones).  El sistema está "muy bien" hecho. Lamentablemente para cambiarlo exige algo de esfuerzo de nuestra parte, lo que se traduce necesariamente en que el día de las elecciones hay que ir y votar. No es suficiente quedándose en casa y diciendo no estoy ni ahí con la política, porque nos guste o no la política es necesaria, que sino estaríamos en la anarquía o la ley del más fuerte y eso claramente es peor aún.

Que, ¿Qué busco siendo weón una vez más y escribiendo todo esto?. Nada poh! simplemente decirme a mi mismo que no soy cordero, ¿que me gustan los corderos?, claro que sí: pero comérmelos para la navidad y el año nuevo. Nunca he sido y no será ahora cuando lo sea: un cordero-ciudadano. El regalo de fin de año que me gustaría sería que los votos nulos, lejos sobrepasen a los de las candidatas. Que implicaría eso?, habría que ver, pero fíjense que no sería malo se extienda unos meses más este gobierno y se repita nuevamente el proceso eleccionario, pero un proceso de verdad!, con actores políticos más creíbles y no de la misma clase de los que ahora están comiendo juntos las platas del estado "pregonando" un "servicio público", Ja! Que no nos gusta este país políticamente como está?, entonces cambiémoslo, pero desde adentro. No haciendo mierda las calles y todos encapuchados. La forma es IR y VOTAR NULO. Tal cual!

Lo bueno de Evelyn?: lo directa y deslenguada que puede llegar a ser y que por lo menos uno sabe lo que piensa sin muchos dobleces.
La malo de Evelyn?: lo avasalladora e intolerante que puede llegar a ser. Puede salir con cualquier cosa: una bomba de presión..., nunca se sabe cuándo explosiona. Eso es un peligro en sí mismo.

Lo bueno de Michelle?: nunca queda mal con nadie (como la canción aquella de "Los prisioneros").
Lo malo de Michelle?: no se lo que piensa, la miro y perdón la analogía (ojo, no es comparación) ¿ubican el juego criollo ese del chancho enjabonado?, bueno siento que si la aprietan un poco tiende a salir para cualquier lado y cual James Bond que nunca perdía el peinado, ésta nunca pierde la sonrisa (a veces la modifica un poco, pero sólo un poco jejeje).

Bueno, se sabe que a los que van en sentido contrario o no bailan al ritmo se les dice: "putas que es weón el weón ese!...", yo  me autodenomino Quijote, siento que suena mejor jajaja… pero aquí, había que hablar claro: no aplicaba ser Quijote… sólo weón! ;)

Aquí, la recopilación de la Candidata Evelyn: 

Aquí, la recopilación de la candidata Michelle: 
http://www.youtube.com/watch?v=fEV9BsYk4tQ (no se queden con el "paso" que aparece al principio, sigan viendo…)


Eso.

sábado, 29 de junio de 2013

El bolsón, con ese olor especial que tenía…

Ayer, una persona de esas que hacen preguntas que no pasan desapercibidas y que tienen lo suyo para el SER, me preguntó: “tú recuerdas cómo es que llevabas los cuadernos al colegio cuando niño?”. En ese momento mi mente viajó al instante, y por alguna razón se detuvo cuando iniciaba mi sexto año básico. A saber: yo cumplo año en marzo, y en ese momento recién había cumplido 10 años (yap, ok, era el año ’80, y qué tanto?! Ah?!, echen las cuentas! ;) el caso es que recuerdo que mis papás me habían regalado un reloj pulsera para mi cumpleaños (es que antes la hora se veía en el reloj, no en el celu como ahora jajaja). Bueno, el caso es que yo tenía un bolsón para ir al colegio (al que me iba caminando), era medio rojo-burdeo, era grande para mi estatura de aquel entonces… y tenía un olor muy intenso como a cuero no lo sé bien… pero era bakán porque a ratos yo lo olía y era hum.. cómo decirlo… era rico el olor, poh! Jajajaja..  Bueno aquí viene una anécdota de la cual nos reíamos mucho con mis papás (cada vez que nos acordábamos): como estaba recién echándose a andar el año y por los “guardijos” propios que se llevan a cabo de un año para otro, mi bolsón éste, estaba extraviado y tenía que ir con mis cuadernos en una bolsa de nylon los primeros días al colegio… pero claro… el perla iba con un bakán reloj nuevo a la muñeca jajajajaja…

Bueno, me quedé por la tarde dándole vueltas a esos años, y fue entrete, porque recordaba por ejemplo, mis vueltas a casa desde el colegio. Había calor aún en ese marzo, era un marzo con mucho olor a verano aún y recuerdo que había incendios forestales cerca de mi Villarrica y el humo que se oponía al sol, tornaba el paisaje amarillento anaranjado… con calor y un olor especial que invadía todos los ambientes: humo!. Caminaba mirándolo todo, reparaba en la forma de las nubes que se veían raras y entremezcladas con el humo. Recuerdo pájaros, bandadas de pájaros que ya no veo a día de hoy… (que lata eso). Recuerdo que al llegar a casa normalmente mi mamá me estaba esperando en la puerta, entraba y mi papá trabajando escuchaba radio…; en realidad eran buenos días!.

En el colegio ocurría algo raro eso sí. Tenía compañeros de curso muy mayores respecto a mí. Es decir, yo tenía 10 años (estaba en sexto) pero tenía compañeros que ya habían vuelto del servicio militar, cuando el servicio se hacía por casi 2 años en Punta Arenas, o sea!... mucha diferencia de edad!. Pero curiosamente las cosas pintaban normal. Recuerdo que cuando había problemas entre los “machos jóvenes” se arreglaban los viernes a la salida del colegio, como cerca de la Parroquia San Francisco (estaba yo en la Escuela Pucara en mi Villarrica, hoy ya no tiene ese nombre) ahí había pasto y un espacio suficiente como para recibir la concurrencia que presenciaría la pelea a puños y que paraba cuando uno de los dos machos-jóvenes ya mostraba que no quería seguir. Hubo algunas realmente muy buenas, de antología! Jajajaja, eso sí: eran como de caballeros; onda, sin ningún tipo de arma blanca: “Uuyy!!!! ¡¡¡que eran violentos!!!!” naaa!, las cosas eran así. Se peleaba, no todas las semanas, claro que no. Pero luego de ello, nadie reclamaba y todo volvía a lo normal. Nadie acusaba de que en el colegio había bulling, nadie andaba metido en el sicólogo ni con apoyo especial de sicopedagogos, ni se le adaptaban pruebas, ni se tomaba medicamento alguno para…, bueno da igual!, para lo que sea!. Pese a todo, recuerdo que por esos tiempos se podía cruzar la ciudad de punta a cabo sin temor alguno a que alguien te asalte y te pueda llegar a matar por un par de puchos!.

Eran los ‘80, los de mi verdad, los de mi historia, los de mi sentir y que están (obvio!) llenos de recuerdos de todos los tipos. Por muchas horas estuve con mis papás junto a mí (ayer y hoy aún), con recuerdos muy vivos…! todo eso, gracias a esa pregunta!. Genial!, Síiiii to’el rato! ;)

miércoles, 19 de junio de 2013

Muerte a los 16

La muerte, por desconexión al corazón artificial, que lo sostenía a la vida a Guido Neira Monsalves, un chico de 16 años de aquí de Temuco, ha traído a mí un par de reflexiones.

Si a día de hoy me preguntan: ¿cuáles han sido tus mejores años de la vida?, pues… me detendría un poco, pero a riesgo de perder las proporciones creo que fueron justamente mis 16 y 17 años (cuarto medio y mi ingreso a estudiar). Esos dos años de mi vida. En ese momento, pensaba en nada trascendente y si bien siempre me he cuestionado temas, lo mío era vivir el día a día de manera muy intensa. Establecí vínculos de amistad (amigas y amigos) con quienes (27 años después) mantengo contacto hasta hoy en la mañana ;)

Me pregunto cómo sería el último tiempo de vida de Guido?, de sus papás?, seguro muy intenso también pero en otro plano…; me consta que el colegio Santa Cruz, estuvo muy conectado con él, hasta el momento de su partida. Seguro y Guido vivió su vida sintiendo y valorando cada minuto de su existencia.

La muerte, claro que “es un tema”, un tema complejo y que crea brechas en función de las creencias religiosas, carismáticas, agnósticas o científicas de cada cual. Pero el hecho objetivo es que la muerte es el fin de la vida en tu cuerpo físico, con tus huellas digitales, tu talla, tu peso, tu color de pelo, de ojos, tu risa, tu voz, tu calor, tu olor. Cuando eso ocurre (o nos ocurra) se llevarán a cabo diversas ceremonias para proceder a la sepultación, donde seguramente (ojalá) alguno de tus amigos (o a los que considerabas como tal) estén presentes de alguna manera. Habrá dolor, habrá recuerdo, habrá cuestionamientos, pero luego… sólo recuerdos. Algunos se preguntarán hasta detalles tales como: y qué se hace con la cuenta de Facebook que tenía?... porque se le sigue viendo lo último que escribió, sus fotos… y eso, claro… también será “otro tema”. Luego, sólo vivirás en el recuerdo de quienes te acogieron –de verdad- en su vida mientras estuviste aquí.

Dónde voy?, a que la muerte es nuestra “compañera”, nuestra celosa compañera que cuando menos lo esperas te hace suyo y sería!. Por ello, estoy más cierto que nunca que si bien nada podemos hacer para evitarla, lo que sí podemos hacer es vivir de manera plena y muy respetuosamente contigo mismo para que al momento de encontrarla estemos en paz, en paz con uno mismo. Eso implica, entre otras cosas: dejar de postergar lo que sabes que debes hacer y no lo haces por “A”, por “B” o por “C”. Eso implica también, que debes salir de tu ostracismo de rutina en el que te encuentras y destaparte tal y como cuando te levantas en una mañana helada… que quedas medio atontado por un largo rato hasta que nuevamente encuentras tu centro… Bienvenido a vivir en consciencia me dijo alguien…; por Dios!, como es de complicado ser consciente!!!. Porque al menos aquel que nunca levanta la cabeza podría ni siquiera angustiarse por “estar ahí”.

Partir a los 16, tal vez implicó para Guido, nunca estar solo; tener siempre el amor de verdad, aquel incondicional y más puro que puede haber. Tal vez, partir a esa edad es hasta más pleno. Hoy, los que hemos pasado esa barrera de edad, el amor lo debemos descubrir/construir nosotros mismos, por nosotros, para nosotros y los demás: eso, es en extremo complejo!. Que gran tarea tenemos a diario!.

A la memoria de Guido. Mis respetos. Q.E.P.D.

http://www.soychile.cl/Temuco/Sociedad/2013/06/19/181204/Murio-el-estudiante-del-colegio-Santa-Cruz-de-Temuco-que-esperaba-un-trasplante-de-corazon.aspx

P.D.:
Entiendo que pueda resultar complejo de entender la redacción, pero es que había mucho sentimiento metido aquí... ;)